¿Cuál es la asignación de espectro de 2,4 GHz?

La asignación de espectro de 2,4 GHz se refiere al rango de frecuencias de radio designadas por los reguladores para diversas aplicaciones, incluidas tecnologías de comunicaciones como Wi-Fi, Bluetooth y ondas de microondas. En la mayoría de las regiones, el espectro de 2,4 GHz está asignado para uso industrial, científico y médico (ISM), así como para radiocomunicaciones sin licencia. Esta asignación garantiza que los dispositivos que operan en este rango de frecuencia cumplan con los estándares establecidos para evitar interferencias con servicios con licencia y otros equipos de radio.

La asignación de frecuencia para 2,4 GHz oscila entre 2,400 GHz y 2,4835 GHz, lo que proporciona un ancho de banda total de aproximadamente 8 MHz. Dentro de este rango, se asignan canales de frecuencia específicos a diferentes tecnologías inalámbricas, como redes Wi-Fi y otros dispositivos de comunicación de corto alcance. Estas asignaciones se gestionan para optimizar el uso del espectro y minimizar la interferencia entre canales adyacentes y bandas de frecuencia superpuestas.

El espectro de 2,4 GHz abarca el rango de frecuencia electromagnética entre 2,400 GHz y 2,4835 GHz. Este espectro se utiliza ampliamente para tecnologías de comunicaciones inalámbricas debido a sus características de propagación y disponibilidad regulatoria para uso sin licencia. Los dispositivos que operan en esta banda de espectro deben seguir pautas regulatorias para garantizar la compatibilidad y minimizar la interferencia con otros sistemas y servicios inalámbricos.

El espectro de canales de 2,4 GHz se refiere a los canales de frecuencia específicos en la banda de 2,4 GHz utilizados con fines de comunicación. En el contexto de las redes Wi-Fi, por ejemplo, la banda de 2,4 GHz se divide en varios canales, normalmente espaciados a 5 MHz. Los canales comúnmente utilizados en este espectro incluyen los canales 1, 6 y 11, que no se superponen en su uso de frecuencia. Al utilizar diferentes canales en el espectro, los dispositivos Wi-Fi pueden evitar interferencias de redes vecinas y optimizar el uso del ancho de banda según los requisitos reglamentarios locales.

La longitud de onda de las ondas electromagnéticas de 2,4 GHz se puede calcular mediante la fórmula: longitud de onda (λ) = velocidad de la luz (C) / frecuencia (f). Para señales de 2,4 GHz, donde la frecuencia (f) es 2,4 × 10^9 Hz y la velocidad de la luz (C) es aproximadamente 3 × 10^8 metros por segundo, la longitud de onda (λ) es aproximadamente 0,125 metros o 12,5 centímetros. Esta longitud de onda relativamente corta permite que las señales de 2,4 GHz se propaguen eficientemente a través del aire y penetren obstáculos con una atenuación moderada, lo que las hace adecuadas para aplicaciones de comunicaciones inalámbricas en interiores y de corto plazo.