Un conjunto electrónico, también conocido como conjunto de antenas o conjunto en fase, es una configuración de múltiples antenas que funcionan juntas como un único sistema de antena. Estas placas se utilizan en radares, sistemas de comunicaciones y otras aplicaciones donde el control direccional y el procesamiento de señales son cruciales. Al coordinar las señales de antenas individuales, los conjuntos electrónicos pueden dirigir los haces electrónicamente, lo que permite un escaneo, seguimiento y rechazo de interferencias rápidos.
AESA (matriz de escaneo electrónico activo) y PESA (matriz de escaneo electrónico pasivo) son dos tipos de conjuntos de antenas de radar. Generalmente se considera que AESA es superior a PESA debido a su capacidad para transmitir señales de radar y recibir ecos de diferentes partes de la antena simultáneamente, mejorando la flexibilidad operativa, la agilidad y la resistencia a las interferencias. Los sistemas AESA son más complejos y costosos, pero ofrecen ventajas significativas en las tecnologías modernas de radar y comunicaciones.
Un conjunto de antenas consta de varias antenas individuales dispuestas de manera coordinada para lograr características de rendimiento específicas. Los tipos de conjuntos de antenas incluyen conjuntos lineales (donde las antenas están dispuestas en una línea), conjuntos planos (dispuestos en un plano bidimensional) y conjuntos conformes (montados en superficies curvas). Estos conjuntos están diseñados para mejorar la directividad del haz, la ganancia y las capacidades de dirección, cruciales para aplicaciones en radar, comunicaciones por satélite y redes inalámbricas.
El concepto de conjunto en fase implica el uso de múltiples elementos de antena con fases relativas cuidadosamente controladas para dirigir la dirección de las ondas de radio transmitidas o recibidas. Al ajustar electrónicamente la fase de cada elemento de antena, el conjunto en fase puede dirigir el haz de radiación sin mover físicamente la antena. Esta capacidad permite un escaneo rápido del haz, un seguimiento mejorado del objetivo y una formación de haz adaptativa, lo que hace que los conjuntos progresivos sean esenciales en los sistemas de radar modernos, las comunicaciones por satélite y las tecnologías inalámbricas.