¿Qué es la congestión del aire?

El ruido en el aire se refiere a emisiones de radar no deseadas o ecos generados por objetos en la atmósfera que no son el objetivo. Estos objetos pueden incluir aves, insectos, fenómenos atmosféricos como nubes o precipitaciones y otras partículas en el aire. El ruido en el aire plantea un desafío en los sistemas de radar al enmascarar o enmascarar los ecos de radar que potencialmente se originan en objetivos reales de interés, como aviones o vehículos. Se utilizan técnicas como la eliminación de obstáculos y algoritmos de procesamiento de señales para mitigar los efectos del ruido en el aire y mejorar el rendimiento del radar en la detección y seguimiento de objetivos.

El desorden en un sistema de radar se refiere a señales o ecos no deseados recibidos por la antena del radar de diversas fuentes distintas de los objetivos previstos. Esto incluye reflejos de las características del suelo, edificios, vegetación, olas del mar y condiciones atmosféricas como precipitaciones o aves. Las señales de desorden pueden oscurecer o interferir con los rendimientos del radar de objetivos reales, reduciendo la capacidad del radar para detectar y rastrear con precisión objetos de interés. Los ingenieros de radar utilizan técnicas de reducción de obstáculos, como el filtrado, el procesamiento Doppler y el procesamiento adaptativo de señales, para distinguir entre los objetivos reales y los parásitos y mejorar el rendimiento del radar.

En física, el desorden se refiere a cualquier señal o perturbación no deseada o irrelevante que oscurece o interfiere con la señal o medición deseada. Puede ocurrir en diversos contextos científicos y de ingeniería donde las mediciones u observaciones precisas son esenciales. El desorden en física puede ser el resultado de ruido de fondo, interferencia ambiental, interacciones no deseadas o artefactos en los procesos de recopilación de datos, lo que requiere métodos para filtrar o minimizar el desorden para extraer información significativa con precisión.