Las técnicas de radar modernas abarcan una variedad de tecnologías y metodologías avanzadas destinadas a mejorar las capacidades de detección, seguimiento e imágenes. Estas técnicas incluyen el radar de matriz en fase, que utiliza múltiples elementos de antena para dirigir electrónicamente el haz del radar sin mover físicamente la antena, lo que permite un escaneo rápido y una formación del haz flexible. Otra técnica es el radar de apertura sintética (SAR), que crea imágenes de alta resolución procesando los ecos del radar recibidos desde múltiples ubicaciones a medida que se mueve la plataforma del radar. Además, el radar de onda continua de frecuencia modulada (FMCW) se utiliza para el procesamiento Doppler de alcance, lo que permite la medición simultánea del alcance y la velocidad del objetivo con alta precisión.
Las diferentes técnicas de seguimiento por radar incluyen varios enfoques adaptados a necesidades operativas específicas. Estos incluyen el escaneo en tiempo de seguimiento (TWS), que permite a los sistemas de radar rastrear múltiples objetivos simultáneamente actualizando sus posiciones en tiempo real. Otra técnica es el seguimiento de hipótesis múltiples (MHT), que gestiona las incertidumbres manteniendo y actualizando múltiples pistas posibles para cada objetivo, adaptándose a las condiciones cambiantes y a las entradas de los sensores. El filtrado de Kalman también se utiliza habitualmente para el seguimiento por radar, ya que proporciona una estimación óptima de los estados del objetivo basándose en mediciones ruidosas a lo largo del tiempo.
Los principios de los sistemas de radar modernos enfatizan el procesamiento avanzado de señales, la integración de múltiples entradas de sensores (como radar, infrarrojos y ópticos) y algoritmos adaptativos para mejorar la detección, la precisión y la confiabilidad. Estos sistemas suelen utilizar técnicas de procesamiento de señales digitales para reducir el ruido, eliminar el desorden y clasificar objetivos. Además, los principios del radar moderno se centran en operaciones orientadas a la red, donde los sistemas de radar colaboran y comparten información en tiempo real para proporcionar una imagen completa del conocimiento de la situación. Además, los sistemas de radar se diseñan cada vez más con capacidades mejoradas de guerra electrónica para contrarrestar interferencias y otras amenazas en entornos operativos complejos.