Algunas firmas de radar comunes incluyen las producidas por aviones, barcos, vehículos e instalaciones terrestres. Cada objeto genera una sección transversal de radar (RCS) única en función de su tamaño, forma, materiales de la superficie y orientación. Estas firmas ayudan a los sistemas de radar a identificar y rastrear varios objetivos.
El tipo de radar más común es el radar de pulsos, que emite ráfagas cortas de señales de radiofrecuencia y mide el tiempo que tardan los ecos en regresar. El radar de pulso se usa ampliamente en aplicaciones como control de tráfico aéreo, monitoreo del clima y vigilancia militar debido a su efectividad en la detección de objetos distantes.
Las formas de onda de radar comunes incluyen formas de onda de pulso, formas de onda continua y formas de onda continua de frecuencia modulada (FMCW). Las formas de onda de pulso son estándar en los sistemas de radar tradicionales, mientras que FMCW se usa a menudo en aplicaciones como radares automotrices para detectar distancia y velocidad con alta precisión.
Las frecuencias de radar comunes varían según la aplicación, pero generalmente oscilan entre la banda L (1-2 GHz) y la banda X (8-12 GHz) para la mayoría de los radares militares y civiles. Cada banda de frecuencia ofrece diferentes ventajas en términos de alcance, resolución y sensibilidad a las condiciones atmosféricas.
El tipo más común de escáner de radar es el escáner de rotación mecánica, que mueve físicamente la antena para cubrir un área amplia. Este tipo se encuentra a menudo en radares de control de tráfico aéreo y marítimo. Los radares de matriz en fase de estado sólido también son cada vez más comunes, lo que permite el escaneo electrónico sin partes móviles, lo que proporciona un seguimiento de objetivos más rápido y preciso.