El radar de campo, también conocido como radar de proximidad al suelo (GPWS, sistema de advertencia de proximidad al suelo), es un sistema de aviónica crítico utilizado en la aviación para mejorar la seguridad del vuelo al proporcionar a los pilotos información en tiempo real sobre la proximidad de la aeronave al suelo y el terreno circundante. Este sistema de radar escanea continuamente el terreno debajo y alrededor de la aeronave, alertando a los pilotos de peligros potenciales como montañas, colinas, torres u otros obstáculos. El radar de campo es particularmente importante durante las fases de vuelo, aproximación y aterrizaje a baja altitud, donde la visibilidad puede verse limitada debido a las condiciones climáticas o las características del terreno.
El radar terrestre funciona emitiendo ondas de radar desde antenas montadas en el fuselaje o en las alas del avión. Estas ondas de radar viajan hacia abajo y hacia los lados, rebotando en las características del terreno que se encuentran debajo. Luego, el sistema de radar recibe las señales reflejadas, que se procesan para crear un mapa digital de los contornos y la elevación del terreno. Esta información se muestra a los pilotos en las pantallas de la cabina, a menudo en forma de mapas codificados por colores o perfiles digitales del terreno. El sistema actualiza continuamente los datos del terreno a medida que la aeronave se mueve, brindando a los pilotos conocimiento en tiempo real de su posición en relación con el terreno circundante y los obstáculos potenciales.
En aviación, el terreno se refiere a las características naturales y del terreno de un área geográfica, incluida la elevación, las pendientes, los accidentes geográficos, la cubierta vegetal, los cuerpos de agua y las estructuras artificiales. El terreno juega un papel crucial en las operaciones de vuelo, especialmente durante las fases de despegue, aterrizaje y vuelo a baja altitud. Los pilotos deben tener en cuenta las características del terreno al planificar rutas de vuelo, realizar procedimientos de aproximación y navegar en diferentes paisajes. El conocimiento y la gestión del terreno son esenciales para garantizar operaciones de vuelo seguras, evitando peligros relacionados con el terreno y optimizando la eficiencia de los vuelos en contextos de aviación civil y militar.