La retrodispersión, en su definición más básica, se refiere al fenómeno en el que las ondas o la radiación se dispersan hacia atrás en la dirección de la fuente después de interactuar con un objeto o medio. Esta difusión ocurre cuando las ondas encuentran obstáculos, partículas o límites que reflejan o dispersan las ondas hacia su origen. La retrodispersión se observa comúnmente en diversos campos, como el radar, la obtención de imágenes médicas, la acústica subacuática y la teledetección, donde desempeña un papel crucial en la detección, obtención de imágenes y análisis de objetos y entornos basados en señales reflejadas o dispersas.
La retrodispersión se define como la reflexión o dispersión de ondas o radiación hacia la fuente después de la interacción con un material o medio. Este fenómeno se caracteriza por la redirección de ondas o radiación en dirección opuesta a la propagación de la onda incidente. La intensidad y las características de las señales retrodispersadas proporcionan información valiosa sobre las propiedades, composición y distribución espacial de los objetos o medios que causaron la dispersión. Los ingenieros y científicos utilizan la retrodispersión en una variedad de aplicaciones para propósitos que van desde el monitoreo ambiental hasta el diagnóstico y la vigilancia médicos.
La retrodispersión explicada implica comprender el mecanismo por el cual las ondas o la radiación se redirigen de regreso a su fuente. Cuando las ondas encuentran objetos o límites comparables en tamaño a su longitud de onda, se produce dispersión. La retrodispersión se refiere específicamente a la dispersión de ondas o radiación hacia la fuente en lugar de en otras direcciones. El análisis de señales retrodispersadas permite la detección y caracterización de objetos en función de sus propiedades reflectantes y la naturaleza de la interacción con las ondas incidentes. Este principio es fundamental en tecnologías como el radar, donde la retrodispersión se utiliza para detectar y rastrear objetivos, y en imágenes médicas, donde la radiación retrodispersada proporciona información sobre la densidad y composición del tejido.