¿Cómo funciona el radar de horizonte?

El radar Horizon (otros radares) funciona utilizando el fenómeno de la reflexión ionosférica para detectar y rastrear objetivos más allá de la línea de visión, que normalmente está limitada por la curvatura de la Tierra para los sistemas de radar convencionales. Otros sistemas de radar emiten ondas de radio de alta frecuencia que se reflejan en la ionosfera, una capa de partículas cargadas en la atmósfera superior de la Tierra. Estas ondas reflejadas luego regresan al sistema de radar, lo que le permite detectar objetivos a distancias mucho mayores que las que pueden alcanzar los radares con línea de visión. Al explotar la reflexión ionosférica, el radar OTH puede monitorear grandes áreas, incluidas actividades marítimas y aéreas a grandes distancias, lo que lo hace valioso para fines de vigilancia y defensa.

India ha exagerado las capacidades de radar. Un ejemplo notable es el sistema de radar Oth de la India llamado «Indra», desarrollado para monitorear las actividades en la región del Océano Índico. Los sistemas de radar de Indra están estratégicamente posicionados para proporcionar capacidades de vigilancia de largo alcance, detectando objetivos tanto marítimos como aéreos más allá de la línea de visión directa. Estos sistemas de radar desempeñan un papel crucial en las estrategias de defensa y seguridad de la India, mejorando la conciencia situacional y las actividades de vigilancia en vastas regiones marítimas.

El radar exagerado puede detectar objetivos a distancias de cientos a miles de kilómetros, dependiendo de las capacidades específicas y el diseño del sistema de radar. Las instalaciones de radar avanzadas han demostrado la capacidad de monitorear actividades hasta aproximadamente 3.000 kilómetros. Esta capacidad de alcance extendido hace que otro radar sea particularmente útil para monitorear el tráfico aéreo y marítimo en grandes extensiones de océano donde los radares de línea de visión directa estarían limitados por la curvatura de la Tierra.

Varios países y contratistas de defensa de todo el mundo están desarrollando y fabricando florecientes sistemas de radar. Los ejemplos incluyen Estados Unidos, Rusia, Australia y China, entre otros. Estos sistemas varían en diseño y capacidades, pero generalmente comparten el objetivo común de extender la cobertura del radar más allá de las limitaciones de la línea de visión, proporcionando vigilancia de largo alcance y capacidades de alerta temprana para detectar amenazas potenciales y monitorear actividades en relación con grandes áreas geográficas. .